Bettina es muy querida por todos los panameños, debido a su carisma
Sus inicios en el mundo de la televisión fueron en el programa 'La Cáscara'
Una de las cosas que más se le dificultaron cuando empezó en el mundo de la televisión fue el hecho de ser extranjera, además de las malas vibras que hay en el medio televisivo. "Personas que están en el medio, que trabajan contigo eran las que te metían el pie para que te cayeras".
Unos de los lugares que le encanta visitar son la playa y la montaña.
Su signo zodiacal es Géminis, y una película que puede ver una y otra vez es "Big Fish".
Confesó que aunque últimamente le ha pasado por la mente ser mamá nuevamente, aún no es el momento.
Desde que es madre, su vida es mucho mejor, pero sigue siendo la misma.
Algo que como madre desea inculcarle a Bettinita es no perder nunca la humildad.
"Lo mejor de estar en TV ha sido conocer a tanta gente. El hecho de ir a la calle y que la gente me salude".
Lo más difícil de estar en la televisión ha sido lidiar con la envidia de las personas, incluso de aquellos con los que ha trabajado.
Bettina cuenta que no tiene un color favorito, aunque ahorita podría decir que es el azul, por el "team" cobras.
La comida a la que Bettina Romina confiesa no puede resistirse es a un buen "steak" con papas.
"No le tengo fobia a nada, pero no me gustan las alturas y me da miedo quedarme encerrada", comentó.
Algo que la retiene de convertirse en madre otra vez es que confiesa que es bastante rumbera, y por el momento no quiere privarse de tomar licor. Otra de las razones es recordar lo difícil que es tener un recién nacido. "Bettinita tenía intolerancia a la leche, lloraba mucho y tenía reflujo".